¡Hola, viajeros! Hoy vamos a Mykonos, pero no solo a ver sus icónicos molinos, sino a sentirlos con cada poro de la piel.
Imagina el aire, salado y fresco, acariciándote la cara mientras subes la pequeña cuesta que te lleva hasta ellos. Sientes el sol cálido en tu piel, un sol que ha bañado estas piedras blancas por siglos, haciéndolas vibrar con una energía antigua. Escuchas el silbido constante del viento, un murmullo que parece contarte historias de marineros, de trigo molido y de la vida sencilla de antaño. A cada paso, el suelo de piedra bajo tus pies te conecta con la tierra, mientras el horizonte se abre, inmenso, azul, tan vasto que casi puedes tocar el cielo. Y aunque no puedas verlos, percibes la majestuosidad de esas estructuras, gigantes silenciosos, que se alzan orgullosos contra el cielo, sintiendo cómo el viento los envuelve y los mantiene en pie, fuertes y eternos. Es un lugar donde el tiempo parece detenerse, donde el viento te susurra secretos y donde la inmensidad del Egeo te abraza.
Ahora, para que tu visita sea lo más fluida y disfrutable posible, aquí tienes unos consejos prácticos:
* Mejor momento del día: Sin duda, el amanecer o el atardecer. La luz dorada transforma el paisaje en algo mágico y la temperatura es perfecta. Además, es el mejor momento para fotos espectaculares.
* Para evitar multitudes: Madruga mucho (antes de las 9 AM) o ve muy tarde por la noche. Durante el día, especialmente cuando hay cruceros, el área se llena bastante.
* Cuánto tiempo pasar: Con 20-30 minutos es suficiente. Es un lugar para admirar la vista, sacar fotos y empaparse del ambiente. No hay mucho más que hacer allí.
* Qué saltarse: No esperes poder entrar en los molinos. La mayoría son propiedades privadas o están cerrados al público. Es una vista exterior, no una atracción visitable por dentro.
* Consejos locales útiles:
* Cafeterías y baños: No hay instalaciones directas en los molinos. Están a un corto paseo del centro de Chora y Little Venice, donde encontrarás muchísimas opciones de cafeterías, bares y restaurantes con baños.
* Calzado: Imprescindible llevar zapatos cómodos y con buen agarre. El camino es empedrado y puede ser irregular o resbaladizo, especialmente si ha llovido o por el desgaste.
* Protección solar: El sol en Mykonos es intenso y no hay sombra en la zona de los molinos. Lleva protector solar, gafas de sol y un sombrero.
* El viento: Mykonos es conocida como "la isla de los vientos". A veces sopla muy fuerte, ¡asegúrate de que tu sombrero no salga volando!
* Vistas: Desde los molinos tienes una de las mejores panorámicas de Chora y Little Venice, así que aprovecha para disfrutar del paisaje urbano y marino.
¡Hasta la próxima aventura!
Olya desde las callejuelas