¡Hola, trotamundos! Si alguna vez te encuentras en Las Vegas y quieres escapar un poco del bullicio del Strip sin irte muy lejos, los Miracle Mile Shops en Planet Hollywood son una burbuja genial. No es solo un centro comercial, es una experiencia diferente. Imagina que pasas de la explosión de sonidos y el calor del asfalto a un espacio donde el aire acondicionado te envuelve al instante, un alivio fresco. Lo primero que notas es cómo el eco de las máquinas tragaperras y los gritos de la gente se van apagando, reemplazados por una música suave de fondo y el murmullo constante de conversaciones. Para empezar tu recorrido, busca la entrada principal desde el Strip, justo al lado del casino de Planet Hollywood. Es la más fácil de encontrar y te sumerge de golpe en su atmósfera.
Una vez dentro, tus pies sentirán un suelo liso y pulcro, diferente al hormigón de la calle. Caminas por pasillos amplios, y aunque no puedes verla, hay una "bóveda" o techo que imita un cielo, a veces azul brillante, a veces con nubes. Escuchas cómo los sonidos de cada tienda se mezclan: la música pop de una boutique de ropa, el tintineo de joyas de otra, el suave repicar de tacones en la distancia. El aire lleva un ligero aroma a perfume, mezclado con algo dulce, quizás de una pastelería cercana. No te apresures, simplemente déjate llevar por el flujo de gente. Te darás cuenta de que hay tiendas de todo tipo, desde las más conocidas hasta pequeñas boutiques con cosas curiosas. Sigue recto, explorando con tus oídos y el olfato.
Hay un punto que no te puedes perder, es una parada obligatoria para los sentidos: el espectáculo de la "Tormenta de Lluvia". Mientras avanzas, de repente, sentirás un cambio en el ambiente, como si la presión del aire bajara un poco. Luego, el sonido: un trueno lejano, que se hace más fuerte y envolvente. Escuchas el chapoteo del agua, como si estuviera lloviendo de verdad. Aunque no puedes ver la cascada, el sonido es tan vívido que casi sientes las gotas. La gente se detiene, el murmullo baja y todos se centran en ese sonido espectacular. Es breve, pero muy potente. Puedes preguntar a alguien si estás cerca de la "fuente de la lluvia" para asegurarte de que lo vives. Ocurre cada hora en punto y a la media.
Después de la tormenta, es probable que el apetito te llame. Los Miracle Mile Shops tienen muchísimas opciones, desde restaurantes más formales hasta sitios de comida rápida. Si quieres algo práctico y con ambiente, busca los lugares que tengan mesas al aire libre (dentro del centro comercial, claro). El aroma de la pizza recién hecha o el café te guiarán. Oyes el murmullo de las conversaciones, el tintineo de los cubiertos y el sonido de las máquinas de café. Te recomiendo un lugar que sea un poco ruidoso y animado, porque eso significa que hay gente y buen ambiente. Pide algo sencillo y sabroso, como una porción de pizza o unos tacos. Es el momento perfecto para sentarte, descansar un poco y absorber el ambiente con todos tus sentidos.
Mientras sigues explorando, notarás que los pasillos se curvan, yendo más allá de lo que esperabas. Hay tiendas más pequeñas y con un tacto diferente, quizás con alfombras que amortiguan tus pasos o superficies más rugosas en las paredes. Si tienes poco tiempo, puedes saltarte las tiendas de souvenirs genéricas que venden las mismas camisetas que encontrarás en cualquier otro lugar. En su lugar, concéntrate en las que tienen un aroma distintivo (como las tiendas de velas o jabones) o las que tienen música más particular. Hay algunas tiendas de dulces que huelen increíble, o boutiques con texturas interesantes en la ropa. No hay prisa, simplemente déjate llevar por lo que te llame la atención a través del oído o el olfato.
Para el final, guarda el paseo de regreso hacia la salida principal. A medida que te acercas de nuevo a la zona del "cielo" artificial, si es por la tarde o noche, sentirás cómo la "luz" cambia. Aunque no la veas, la atmósfera se vuelve más tenue, más íntima, casi como un atardecer. Es un cierre suave para tu visita. Cuando estés listo para salir, la misma entrada por la que entraste te devolverá al Strip. Sentirás de nuevo el calor y el bullicio de Las Vegas, pero ahora con la sensación de haber descubierto un pequeño oasis sensorial en medio del desierto.
¡Hasta la próxima aventura!
Leo del Camino