Castillo Tratzberg: Audiocuento Vivo, Secretos Desvelados

Merece mucho la pena, sobre todo si subes en el tren les encanta a los niños, el castillo está en muy buenas condiciones y muy bonito

Nos pareció que el castillo estaba bien - vale la pena el viaje desde Innsbruck. Septiembre es el hombro - temporada, así que no tuvimos que esperar mucho para una gira. Pagamos unos 8 euros extra por el espectáculo de auriculares de realidad virtual, que da un poco de historia para el castillo. El grupo de la gira estaba formado por cuatro personas de habla alemana y nosotros dos (hablantes nativos de inglés). Sí, el Guía nos hizo escuchar los aparatos de audio para los ingleses, pero hablaba bastante bien inglés y respondía preguntas y charlaba con nosotros si lo contratábamos. El patio interior está muy bien decorado, al igual que varias de las habitaciones. Hay algunos muebles muy excepcionales, con tallado increíblemente detallado o incrustaciones, etc. El viaje en tren cuesta solo 2 Euros por persona (si mal no recuerdo) , y creo que 3 Euros por un viaje de ida y vuelta. El paseo por la carretera utilizada por el tren nos llevó 20 minutos, así que creo que subir tomaría 10 minutos más. El sendero va mucho más directamente al castillo. Podría ser un poco resbaladizo debido a la grava de guisante que vimos en él, pero intentaríamos ese enfoque si volviéramos a visitar (y somos viajeros mayores). No vimos mala gestión, dificultades lingüísticas, o personal grosero como se menciona en una Opinión abajo de abril de 2022 , y no podemos estar de acuerdo en que la 'exposición es pobre'. Esto vale la pena en coche desde Innsbruck.

Tenemos el autobús de Jenbach (601 autobuses por hora) Caminó colina arriba - bastante empinado pero perfectamente manejable. El guía turístico (Peter) era bueno. Los dispositivos de guía portátiles funcionaron bien. Fui a 9 habitaciones. Mucho para mirar. Se mojó mucho esperando el autobús! Un refugio sería genial.

El castillo de Tratzberg es un castillo medieval muy hermoso con un montón de muebles originales. Te puedes imaginar cómo vivían en el castillo hace 500 años. Después de viajar en Austria durante 25 años y vivir en el Tirol durante cuatro años, nunca imaginé que habría un castillo tan hermoso y bien renovado en el Tirol! Podría ser un gran destino turístico, pero tal vez los propietarios no quieren autobuses cargados de turistas porque viven en el castillo. Fuimos temprano en una mañana de domingo, caminamos por la carretera de asfalto de 20 minutos (no se permiten coches) al castillo. Fue una caminata fácil. Si hubiera estado sola, podría haber caminado mucho más rápido, aunque no estoy en una gran forma. También hay una ruta de senderismo más empinada de 10 minutos al castillo. Entramos inmediatamente, y el tour estaba muy bien organizado. Conseguimos audioguías (disponibles en varios idiomas) , y el amable guía explicó algunos más. La fotografía fue permitida durante el recorrido.

El castillo en sí es agradable y definitivamente vale la pena subir la montaña. Tienes la opción de caminar por un camino, más rápido pero más empinado, en la carretera, más largo o con el tren, pero no viene muy a menudo, solo un tren haciendo bucles. Sin embargo, el recorrido puede mejorar mucho. Mucha espera por la "guía", que es solo una persona que lo empuja para asegurarse de que no se quede atrás. Esperará un rato a esta "guía, lo bueno es que hay asientos, luego, cuando ella llega, el grupo se divide en 2 grupos, de habla alemana y de habla inglesa. El grupo de habla alemana recibe un recorrido en 3D VR, los ingleses sólo una breve presentación oral. Esto se sintió muy "no bienvenido" por decir lo menos. A partir de ahí el recorrido es autoguiado, audio. Pero con tanta gente no puedes ver todo, solo escucha, antes de que el "guía" te muestre la puerta de la siguiente habitación. En resumen, sí, el castillo es bonito pero la administración carece de eficacia. De regreso tomamos el tren, estaba lloviendo. 3 euros. El aparcamiento también cuesta 3 euros. Se suma a la tarifa de entrada, nada barata.

Este castillo está situado en Inntal, al este de Innsbruck. Teníamos un poco de tiempo libre y decidimos agregarlo a nuestro itinerario. ¡Qué lugar tan increíble! La parte más antigua del castillo se construyó en 1500 y gran parte del mobiliario y la decoración de las habitaciones se remonta al siglo XVII. Habríamos pasado felizmente más tiempo buscando en más detalles muchos de los artículos de valor incalculable que se exhiben. Fuimos guiados por un guía turístico experto que hablaba bien inglés, complementando la muy buena audioguía disponible en varios idiomas. Hay mucho espacio para aparcar, pero esto está más abajo en el valle. Tuvimos una agradable caminata de 10 minutos por un camino bastante empinado para llegar al castillo, pero hay un pequeño tren para aquellos que no pueden negociar el camino. La ruta que toma el tren también se puede caminar y es una subida más suave de 20 minutos al castillo a pie.

Qué hermoso castillo con guías amigables. Éramos los únicos ingleses en el recorrido y nuestro guía hizo todo lo posible para que nuestra visita fuera agradable. El conductor del tren de carretera también fue amable. Estamos muy contentos de haber visitado.

Visited as part of a package tour. It is a well preserved schloss with many interesting artifacts, especially the furniture. The family tree fresco was very interesting. The audio presentation brings the place to life. The guides were very knowledgeable. It would appear that due to its location, you can only photograph the whole of the schloss from the motorway.

We just made this tour inside the castle. Even if we came on a rainny day, we parked the car take the mini train (by the way the driver of the train Mr. Gigi is a very polite person and helpfull for any questions that you may have, all respect) go up to the castle and listen the story of this castle.

The Schloss is a remarkable building. Been lucky enough to visit twice recently, first was last September and secondly this July. In September the tour group was about 20+ with a young female guide who supplemented the audio tour with additional information and there was time for question and answer sessions. In July, however, we stood around waiting an hour from ticket purchase to the start of the tour. There were several school trips going on in addition to tourists. The young male guide had a very large group 50+ to give handsets and headphones to as well as helping the virtual reality tour group. There was a lot of waiting around. We would have liked to spend longer in each room and have an expert description of the furniture and art than the audio provided. The audio tour is aimed at a young audience. The furniture is beautifully preserved, much is of international importance, and yet is mostly on open display. A wonderful place to visit but the visitor experience needs improvement.