Innsbruck: Salto Bergisel - Vistas Épicas y Arquitectura Única

Buena experiencia , lo recomiendo, sobre todo las vistas desde el restaurante. La pista de salto da vertigo

Impresionante. Tuvimos la suerte de que estaban practicando algunos saltadores. Puedes colocarte en diferentes alturas para ver los saltos. Desde arriba impresiona ver la altura desde la que se lanzan

El sitio es precioso siempre veo los saltos en enero pero ver directamente la pendiente y el final de la misma es sorprendente

Habíamos estado hace unos años en verano, y es una experiencia buenísima, subir y ver por tí mismo la zona desde donde se lanzan los esquiadores profesionales. Pero esta vez fuimos para ver la competición de saltos de ski del 4 de enero. Enhorabuena a la organización por hacerlo tan bien, quedamos encantados. Aunque echamos de menos un poco más de entretenimiento antes de que empezase la competición. Aunque vayas cuando vayas a Innsbruck sea verano o invierno hay que subir a Bergisel, merece la pena pagar.

Fuimos desde las 10 am hasta el mediodía y vimos a Thomas saltar seis veces. Eso hizo de la visita una experiencia inolvidable, especialmente porque pudimos hacerle un montón de preguntas sobre su deporte. El edificio en sí mismo es una hazaña arquitectónica, pero en sí mismo no vale la pena el desvío si no se combina con la demostración de "vuelo de esquí". Tomamos el bus 589 , muy conveniente desde el centro, pero solo por hora. Tienda de regalos tiene varios coleccionables frescos.

Si alguna vez ves saltos de esquí observados en los Juegos Olímpicos de Invierno sabrás lo que es esto. El tamaño puro pondría miedo en el esquiador promedio. La plataforma de visualización ofrece una excelente vista sobre Innsbruck. ¿Estaban bromeando cuando localizaron el final del salto de esquí junto al cementerio?

Agradable para visitar con vistas impresionantes. Muy deteriorado lugar. Una hora como máximo de visita. Taxi mejor manera de visitar como una montaña arriba.

Pasamos una buena hora aquí tomando el tranvía a la cima y el ascensor a la plataforma de visión. Los saltadores son diablos absolutamente atrevidos y una alegría de ver. Luego fue y se sentó al sol en las tumbonas y admiró su gracia y valentía desde el otro extremo. Impresionantes vistas sobre Innsbruck. Fuimos temprano y estamos contentos de haberlo hecho, ya que era fácil moverse sin ninguna espera.

Actualmente entrada a mitad de precio (5 euros por adulto). Funicular averiado, por lo que hay que subir unos cientos de escalones. Ascensor en torre bien. Lo mejor es coger el autobús 589 desde la estación. El tranvía número 1 le dejará en 15 minutos a pie cuesta arriba.

Una experiencia increíble y una visita obligada si viaja a Innsbruck por unos días. Es fácil llegar en el tranvía número 1 y luego a 10 minutos a pie hasta el salto. Maravillosas vistas incluso con niebla. . Tenga en cuenta que el funicular no funciona actualmente por lo que hay muchas escaleras.