El pueblo, la naturaleza, la historia y la tierra de Curazao han sido moldeados por el agua, tanto por el mar como por la disponibilidad de agua dulce. El cristalino mar azul de Curazao no solo alberga peces coloridos y maravillosas formaciones de coral, sino que en el lado norte de Curazao, el viento empuja el mar hacia la tierra con gran fuerza, creando espectaculares exhibiciones acuáticas, como géiseres naturales y fuentes.