Descubre en el promontorio, en una cornisa de los acantilados jurásicos ubicados en el misterioso Cabo Espichel, el segundo cabo más occidental de Europa, las increíbles huellas de dinosaurios. Son un icnofósil de pistas dejadas por saurópsidos y terópodos, hace aproximadamente 150 millones de años. Una ubicación simultáneamente aislada y aislante, desolada y difícil, donde la exuberante y vigorosa vegetación de la montaña es prácticamente impenetrable por el hombre y donde la absoluta aridez del promontorio es inhabitable, pero a donde la gente iba atraída por la naturaleza fronteriza y misteriosa del lugar.